Un nuevo escándalo sacude al Hospital Cestino de Ensenada tras denuncias de acomodos y un "concurso trucho" que ha dejado a los trabajadores del nosocomio con bronca y miedo por posibles represalias. La situación ha generado un clima de tensión dentro del hospital, y los gremios ya han tomado cartas en el asunto. Pero, ¿qué fue lo que sucedió? ¿Por qué hay tanto malestar entre el personal?

Concursos manipulados y acomodos en el Hospital Cestino

Todo comenzó cuando se debía designar a la nueva jefa del departamento de Enfermería del Hospital Cestino. Lo que debería haber sido un proceso transparente y legal terminó envuelto en polémica. Según denuncian los trabajadores, la selección estuvo plagada de irregularidades, con la designación a dedo de la candidata que ya estaba previamente acomodada para el cargo, dejando a dos postulantes fuera del concurso de manera injusta. Lo mismo han denunciado en la parte de educación, dónde el SAD parecería elegir algunos cargos en jardines a dedo. Pero eso será para después...

"El día en que deberíamos haber defendido nuestros proyectos, el director ni siquiera se presentó. Envió a una persona ajena al hospital y luego, cuando una de las concursantes quiso elevar una queja, le dijeron que la nueva jefa ya había sido elegida a dedo", relató una fuente interna que prefirió mantenerse en el anonimato por miedo a represalias.

Los sindicatos ATE, Salud Pública y el Sindicato Municipal denunciaron estas irregularidades, pero, hasta el momento, no han recibido ninguna respuesta por parte de las autoridades del hospital ni del director Roque Gutiérrez, señalado como uno de los responsables de este acto de corrupción.

Bronca y asambleas en el hospital

El descontento en el Hospital Cestino no ha pasado desapercibido. Tras este episodio de acomodos y favoritismos, los trabajadores se organizaron en asambleas para repudiar lo ocurrido y exigir respuestas. Sin embargo, las autoridades aún no han dado explicaciones, lo que ha aumentado la desconfianza y la preocupación por posibles represalias hacia aquellos que se atreven a denunciar lo ocurrido.

Un hospital salpicado por escándalos

Este no es el primer escándalo que afecta al Hospital Cestino. Apenas unos meses atrás, el centro de salud fue noticia cuando un exbecario, Cristian Cabral, denunció haber sido discriminado por su condición sexual y física. Cabral, quien trabajó como enfermero durante casi dos años, aseguró haber sido víctima de hostigamiento y persecución tras un accidente laboral que lo dejó con una lesión en su pierna ortopédica.

Según Cabral, los jefes del área de Enfermería lo discriminaban, acusándolo de usar su condición como excusa para faltar al trabajo. Este acoso culminó con su despido y la posterior denuncia ante el INADI, que falló a su favor luego de dos años de espera.

La corrupción y los acomodos en educación

Este tipo de corrupción en hospitales no es un hecho aislado en la región, y es un claro reflejo de cómo los acomodos afectan distintos ámbitos de la gestión pública, incluso en la parte de educación. Docentes y directivos han señalado más de una vez que se han nombrado cargos en jardines y escuelas arbitrariamente, sin ser publicados en el ABC ni salir en los Decretos. La falta de transparencia y el favoritismo siguen siendo problemas estructurales que minan la confianza de los ciudadanos en sus instituciones.