La localidad de Chascomús ya no es el tranquilo lugar que solía ser para sus vecinos, quienes ahora conviven con la constante preocupación por violentos robos y crímenes que alteran su tranquilidad diaria. A pesar de los reclamos continuos, el accionar de las autoridades municipales parece no ser suficiente para brindar respuestas efectivas.

Los robos a viviendas, comercios y cables de luz, así como los ataques a productores ante denuncias policiales, son situaciones que se repiten a diario en la zona. El punto más crítico se alcanzó con el asesinato de un joven de 16 años a una cuadra de la laguna, quien fue apuñalado con una barra de hierro para robarle la mochila. Este trágico suceso puso a Chascomús en el centro de la atención nacional.

Ante esta situación, el Concejo Deliberante tomó medidas y declaró la emergencia en seguridad por seis meses. En su declaración, alertaron sobre el aumento de los hechos delictivos en la ciudad y zonas rurales, instando al intendente municipal a tomar medidas concretas y urgentes para proteger a los vecinos y sus propiedades.

Simultáneamente, en el parador Atalaya de Ruta 2, se vivieron momentos de tensión cuando un grupo de tres delincuentes intentó robarle a una familia que se detuvo a comprar medialunas. Por suerte, la intervención rápida de un efectivo de la Policía bonaerense evitó el robo.

Sin embargo, las respuestas del municipio no han calmado el malestar de la población. Las declaraciones de la secretaria de seguridad, Mariela Moscarella, durante una entrevista radial en el programa "AM Show", generaron más inconformidad entre los habitantes. Moscarella expresó que no puede haber un policía en cada casa ni una cámara en cada mochila, instando a los padres a tomar medidas de precaución.

Mientras tanto, los hechos delictivos continúan multiplicándose día tras día en Chascomús. Recientemente, se informó sobre la detención de un joven en relación a un robo ocurrido días atrás en un domicilio de la calle Grito de Dolores. En este incidente, los ladrones rompieron una reja de una ventana de un dormitorio y se llevaron dinero en pesos y dólares, así como armas de fuego.