Del mandato al propósito: el nuevo paradigma en la formación de herederos familiares

Por Jael Itzcovitch. Directora y Mentora de Estim Groups. (www.estimgroups.com) 

27-05-2025 - Por Noticias Ensenada

Del mandato al propósito: el nuevo paradigma en la formación de herederos familiares

Durante mucho tiempo, la continuidad de las empresas familiares se construyó sobre un mandato: "Vos vas a seguir con esto". Pero los tiempos cambiaron. Las nuevas generaciones buscan sentido, libertad y coherencia. Y las familias que entienden eso, se están animando a transformar la manera en que acompañan a sus jóvenes.

Este cambio de enfoque se refleja también en los números. Según el Global Family Business Survey de PwC (2023), el 68% de las empresas familiares a nivel mundial reconocen la importancia de alinear los valores familiares con los objetivos empresariales para garantizar la continuidad. En América Latina, sin embargo, solo el 23% cuenta con programas estructurados para la preparación de sus herederos. Esto deja en evidencia una brecha que aún queda por cerrar, y que puede marcar la diferencia entre una continuidad sustentable y una ruptura generacional.


Había una vez: el modelo del mandato


Tradicionalmente, el modelo de sucesión en las empresas familiares respondía a un formato rígido: el padre o madre que lideraba la empresa decidía quién debía continuar. Era una fórmula que priorizaba la eficiencia, la tradición y la obediencia. En ese contexto, la idea de propósito personal no tenía espacio. Los valores predominantes eran el esfuerzo, la responsabilidad, la continuidad y la obediencia al legado. La identidad se subordinaba a lo que "debía ser".

Así se educaron generaciones enteras. Y si bien este modelo garantizó cierta estabilidad, también generó una carga emocional fuerte. Muchos herederos aceptaron roles que no les eran propios, lo que derivó en frustraciones, conflictos o incluso quiebres empresariales encubiertos bajo vínculos familiares tensos.


La realidad actual: el dilema de una generación que quiere hacer las cosas distintas


Hoy, los líderes de la generación X enfrentan una tensión diferente. No quieren repetir lo que vivieron. No quieren imponer a sus hijos un camino que ellos mismos no eligieron con libertad. Desean que sus hijos sean felices, auténticos, plenos. Pero al mismo tiempo, sienten la necesidad de que el legado continúe, de que lo que se construyó con tanto esfuerzo no se pierda. Es una encrucijada emocional y estratégica que muchas familias viven en silencio.

Y en ese intento por no presionar, por no repetir el mandato, a menudo aparece un nuevo problema: el silencio. No hablar de la empresa, no contar los desafíos, no compartir el legado. El resultado es que muchos jóvenes crecen sin conexión emocional ni información suficiente para valorar o elegir involucrarse. Y como no se puede amar lo que no se conoce, el vínculo con la empresa se enfría, se distancia, se diluye.


¿Qué hacemos con esta nueva realidad?


La clave no está en imponer ni en desaparecer. Está en acompañar con libertad y conciencia. En construir espacios donde los jóvenes puedan descubrir, explorar, preguntar, equivocarse, dudar. Donde puedan pensar si realmente ese legado puede ser parte de su propósito personal. Y si no lo es, poder asumirlo con madurez y respeto. Porque nadie está obligado a continuar la empresa familiar. Pero todos deberían tener la posibilidad de decidirlo con información y libertad.
Grupos Estim nace desde esta necesidad. Como una propuesta que parte de tres conceptos centrales: libertad, vocación y habilidades. Libertad para elegir con conciencia. Vocación como brújula interna. Habilidades como herramientas para actuar con solidez.

Su propuesta no es académica ni estándar. Es vivencial, cercana y profunda. Acompaña a los jóvenes en un recorrido donde pueden conocerse, nombrar lo que sienten, fortalecer sus capacidades y elegir con responsabilidad su lugar en la historia familiar. Y ayuda también a las familias a crear nuevas formas de diálogo, más sinceras, más humanas y más constructivas.
El propósito reemplaza al mandato, no porque sea más cómodo, sino porque es más real. Porque es lo que genera continuidad emocional además de estratégica. Y porque permite que lo heredado no sea una carga, sino una plataforma.

Grupos Estim entiende este dilema. Su metodología acompaña a los jóvenes en este cruce de caminos, pero también ayuda a las familias a fortalecer sus procesos internos. A convertir el legado en una invitación, no en una imposición. Y así, sostener lo construido con raíces más profundas y vínculos más conscientes.


Por Jael Itzcovitch. Directora y Mentora de Estim Groups. (www.estimgroups.com)