Las recientes inundaciones que han golpeado al sur de Brasil, con especial impacto en la ciudad de Porto Alegre, han provocado una sorpresiva euforia en la Casa Rosada, ante la posibilidad de que el gigante vecino sufra pérdidas significativas en su cosecha de soja, lo que podría impulsar la cotización internacional de este cultivo.

El aumento en el precio de la soja no es solo una especulación, sino una realidad palpable. En los últimos días, el valor de la tonelada de soja ha pasado de USD 420 a USD 446, según los reportes más recientes. El desastre climático en el sur de Brasil está devastando cosechas e infraestructura, y está teniendo un impacto directo en las cotizaciones internacionales de la soja, así como también del trigo y el maíz.

En el Palacio de Hacienda, están convencidos de que esta tendencia alcista continuará y pronostican que el precio de la soja podría alcanzar niveles entre USD 520 y USD 500 por tonelada. "Nos estamos acercando a los 600 dólares que tuvo Alberto", celebran en el equipo de Toto Caputo.

Además, se estima que estas lluvias también podrían afectar los cultivos en Uruguay, lo que podría compensar la caída pronosticada en la cosecha de soja debido a factores climáticos locales y la baja de precios, estimada en 6.700 millones de dólares.

El sur de Brasil es conocido por sus importantes cultivos de granos, así como por la producción de aves de corral y cerdos. Sin embargo, las tormentas han causado estragos en la región, dejando al estado de Rio Grande prácticamente devastado. Según las proyecciones, Brasil podría perder hasta el 15% de su cosecha regional.

Mientras tanto, en Uruguay, la situación también es preocupante. Se esperan fuertes tormentas y existe el temor de que el Río Uruguay experimente una crecida significativa. En la ciudad de Durazno, en el centro del país, el Comité de Emergencias Departamental ha declarado una situación crítica debido al desborde del Río Yi y las intensas lluvias en su cuenca, que han alcanzado los 200 milímetros.

Sin embargo, a pesar del optimismo del gobierno argentino, persiste la incertidumbre sobre si los precios proyectados para la soja resultarán atractivos para los exportadores, quienes hasta ahora han mostrado cierta reticencia a liquidar sus cosechas. Según fuentes del sector, con los precios actuales, los exportadores están optando por hacer coberturas y asegurar los precios hasta agosto. No obstante, si se cumplen las previsiones del gobierno y el precio del grano supera los USD 500 por tonelada, es probable que las liquidaciones se aceleren significativamente, reconocieron las fuentes consultadas.