En un fallo que sienta jurisprudencia, la justicia civil platense reconoció la violencia económica de género como un factor determinante en la división de bienes durante un divorcio.

En un caso emblemático, una mujer que había solventado la totalidad de las cuotas de un crédito hipotecario para adquirir una vivienda con su pareja, logró conservar la propiedad del inmueble a pesar del divorcio.

¿QUÉ ES LA VIOLENCIA PATRIMONIAL Y ECONÓMICA ?
Es el poder que se ejerce contra las mujeres para hacerlas dependientes económicamente de los hombres; cuando se controla o limita sus ingresos económicos y la disposición de los mismos, o cuando se las priva de los medios indispensables para vivir.

Un precedente histórico El juez Carlos José Catoggio, a cargo del Juzgado en lo Civil y Comercial N° 25 de La Plata, determinó que la mujer, identificada como "Elizabeth Norma, I", tenía derecho a quedarse con el 100% de la vivienda debido a la violencia económica ejercida por su ex pareja, "Alejandro, F", luego del divorcio.

Esta decisión se basó en la evidencia de que la mujer había asumido el pago de las cuotas hipotecarias y no había recibido el pago de la cuota alimentaria, antes de su divorcio.

La perspectiva de género como eje central

Este fallo destaca la importancia de aplicar una perspectiva de género en los casos de divorcio. Al reconocer la violencia económica como una forma de violencia de género, la justicia platense está dando un paso fundamental para garantizar la igualdad y la protección de las mujeres.

Los abogados de la mujer, Daniel Urriza y Ricardo Barrionuevo, celebraron el fallo y destacaron que este caso sienta precedente para futuras demandas post divorcio. "Es interesante el abordaje de la violencia en este sentido, porque se juzga con perspectiva de género algo que la Suprema Corte de la Provincia de Buenos Aires viene ordenando a los jueces", afirmó Urriza.

Un mensaje claro

El fallo del juez Catoggio envía un mensaje claro: la violencia económica de género no será tolerada y la justicia actuará para proteger a las víctimas. Este caso demuestra que es posible lograr avances significativos en la lucha por la igualdad de género a través de la aplicación de la ley tras un divorcio. Fuente: agenciafueros.com.ar